Guinea (Fernando Gamboa)

Blanca Idoia es antropóloga y lleva un par de meses en Guinea Ecuatorial con el propósito de hacer un estudio para UNICEF sobre la población infantil. Una noche se dirije al hospital de Malabo con una mujer enferma y, en el difícil trayecto hacia el hospital, el jeep de Blanca es detenido por un grupo de militares que la detienen por no llevar la documentación y la trasladan a una opresiva celda sin darle ningún tipo de explicación. Condenada a veinte años de prisión sin posibilidad de fianza ni recurso, Blanca es subida en un camión junto con otros presos con destino desconocido. Casi como un milagro, en pleno trayecto, la puerta trasera del camión se abre repentinamente por haberse roto una de las bisagras y todos los presos huyen desesperados por la jungla arropados por la oscuridad de la noche, incluida Blanca que es ayudada por Gabriel, un guineano desconocido al que también llevaban preso.

Así es como se inicia esta trepidante aventura que nos traslada a la más cruel de las historias, pues la narración describe la dura situación que se vive en el país y que, desgraciadamente, es real como la vida misma. La protagonista de la historia se ve sumida en una situación que a cualquier lector le resultará dura, injusta, inconcebible por completo. La sensación de impotencia es enorme, me he visto en la piel de Blanca y lo he pasado fatal huyendo con ella de aquí para allá en el intento de salvar la vida. Fernando tiene una mano magistral para contar historias, su redacción es impecable y consigue trasladar al lector al lugar de los hechos con una pasmosa facilidad. Sin duda alguna este libro es una denuncia que el propio autor expresa respecto a la tremenda pesadilla que viven los guineanos bajo el poder de su gobierno, una situación que hace que el lector pueda sentir la indignación y la impotencia de saber que estas cosas ocurren de verdad.

Más de 300 páginas que se leen en un abrir y cerrar de ojos con el corazón en un puño. Un final impactante. Una novela excelente, sin ninguna duda.